domingo, 27 de enero de 2013

Turismo en Córdoba

Córdoba es la tercera ciudad de Andalucía tanto por tamaño, como por población. Se localiza en una depresión a orillas del Guadalquivir y al pie de Sierra Morena.


Debido al gran contenido histórico que contiene esta bella ciudad andaluza, la demanda de turismo cultural es elevada. La mayoría de las atracciones turísticas se remontan a la época de expansión musulmana, a partir del siglo VIII; sin despreciar las obras artísticas y arquitectónicas de la Córdoba romana, cristiana y de los siglos XVI- XIX.
Otra ventaja turística que presenta esta ciudad es el buen clima que posee, de tipo mediterráneo.


Su casco histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994, aunque diez años antes, en 1984, lo había sido la Mezquita-catedral de Córdoba. Fue candidata a la capital cultural europea para el año 2016. Siendo finalista para representar a España. Además la Fiesta de los Patios Cordobeses fue designada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco en diciembre de 2012.

El tipo de turismo que presenta Córdoba es el siguiente:
  • Motivación: cultural
  • Origen: alto porcentaje de turistas extranjeros (norteamericanos, centroeuropeos y japoneses)
  • Renta: clase media-alta
  • Alojamiento: establecimientos hoteleros


Córdoba siempre ha sido una ciudad muy turística pero ha presentado una clara evolución a lo largo del tiempo.Durante todo el siglo XIX, se registró una notable afluencia de viajeros hacia las ciudades histórico-monumentales más destacadas,como Sevilla, Granada y Córdoba.


La actividad turística tiene, a partir de los años 60, una importancia decisiva para la economía de la región, no sólo por su aportación a la Balanza de Pagos o al crecimiento del sector inmobiliario, sino como actividad generadora por si misma de un gran volumen de riqueza y empleo.

A partir de los 80 el turismo en Córdoba desciende pero este periodo de declive no es muy largo ya que comienza rápidamente a incrementarse.Los motivos de este descenso del turismo son los siguientes:

-Si ponemos en relación la evolución del tipo de cambio de nuestra moneda con las principales divisas internacionales  se observa como España se encarece desde mediados de los 80, tendencia que no ha cesado hasta las devaluaciones de 1992. De este modo, la peseta fue una de las monedas más apreciadas dentro del marco de los países de la OCDE. El resultado ha sido una gran pérdida de competitividad y rentabilidad de la actividad turística en nuestro país.
-Un factor añadido es la  evolución de los precios en España y Andalucía, que viene reduciendo los diferenciales de rentas y salarios entre nuestro país y los principales países emisores. Se produce con ello la pérdida de una de nuestras principales ventajas competitivas, los menores precios relativos, que tanto nos habían beneficiado en la etapa anterior.
- Aparición de nuevos competidores, principalmente del área mediterránea (Marruecos, Túnez, Turquía, África Oriental,..), que ofrecen un producto turístico similar a precios más reducidos.
- La progresiva liberalización del tráfico aéreo y el  abaratamiento de los vuelos que tiene lugar desde principios de los noventa en la Comunidad, añade nuevos países a la lista de destinos competidores. Alternativas más lejanas y exóticas para los turistas europeos a precios realmente competitivos, como es el caso de ciertos países del Caribe, Asia o África.















lunes, 7 de enero de 2013

La industria española en la actualidad



El mapa propuesto expresa de manera gráfica la distribución de la industria en nuestro país, España. La información se encuentra representada mediante circunferencias de tres tamaños distintos que identifican entre: grandes polos industriales, otras áreas industriales y pequeños focos industriales. Además según el color del área podemos distinguir entre áreas en reestructuración o ejes más dinámicos.

La fuente que nos ha aportado este gráfico es desconocida por lo que no conocemos el grado de fiabilidad que el mapa nos ofrece.

Como podemos observar la industria en España se encuentra desigualmente distribuida, los focos que más industria acogen son Bilbao, Barcelona, Valencia y como es obvio, la capital, Madrid. Por un lado, Bilbao se encuentra en un área de reeestructuración, mientras que las otras tres pertenecen a zonas de ejes más dinámicos. Todas ellas se encuentran vinculadas con los centros urbanos más próximos, el medio de transporte más empleado en estos casos es el terrestre (por carreteras o ferrocarril).
Las industrias más características de estos lugares son las siguientes: industria siderúrgica (Bilbao); industria química, agroalimentaria,textil,electrónica y automovilística (Barcelona); minería, textil y maderera (Valencia) y por último, agroalimentaria, automovilística, papelera, electrónica y química (Madrid). La gran industria de estas localidades se debe a que son las más grandes en cuanto a extensión y economía y a disponibilidad de recursos naturales y mano de obra barata como es el caso de Bilbao.

La segunda zona con mayor industrialización se compone de las localidades del este español pertenecientes al eje mediterráneo en las cuales predomina la industria textil y agroalimentaria. Dentro de esta zona también se incluyen la mayor parte de áreas de la España septentrional, como son Galicia (energética, automovilística, astilleros y agroalimentaria), Asturias (industria extractiva y siderúrgica) y Cantabria (agroalimentaria, química y eléctrica). Son zonas que antaño poseían una gran industria pero con el paso de los años estan presenciando un declive ya que los recursos naturales que eran su principal fuente de ingresos escasean o las industrias han sido compradas por grandes empresarios extranjeros, que impiden enriquecerse a la población nativa.

El resto de provincias o regiones se tratan de pequeños focos industriales, ejemplos de ello son: la mayor parte de las regiones de Castilla y León, Extremadura, Castilla la Mancha, Andalucía y las Canarias. Son zonas que tradicionalmente se han dedicado a la agricultura y ganadería como es el caso de Castilla y León o al turismo (Canarias). A día de hoy estas regiones encuentran su principal fuente de ingresos en el sector terciario.